Debo decirles la verdad, no me gusta mentir…
Nunca, nunca había comido
o probado la fruta del Mamey, no tengo perdón de Dios. En realidad no es que no los hubiese visto,
es solo que le tenía temor. Me decía mi
mamá, cuando pequeña; que la fruta del Mamey ocasionaba “empacho” eso le dijeron a ella cuando pequeña, nos transmitió esa idea y definitivamente lo creí. No sé de dónde
sacaron esa idea, superstición o mala experiencia de la que ella fue víctima y por lo menos, yo también.
A mi esposo le encantan, yo nunca lo probé. Fueron muchos
los que deje perder, no sé si por lo que me dijeron, me predispuso a su olor
o la percepción de la mancha de la
fruta.
El otro día mi vecino del frente a nuestra casa le regalo
tres mameyes, mi esposo me hizo una petición muy especial; que le preparara dulces
con una de sus frutas preferidas, mi ojos
se abrieron en señal de asombro creo que las pupilas se expandieron a su
máxima capacidad. Y yo con mi corazón partido me vi obligada a complacerle, el
me hizo dos peticiones muy específicas y aquí comparto con ustedes el resultado
de una de ellas, un Dulce de Mamey, la otra en su debido momento la verán.
Grande fue mi sorpresa, elabore el dulce y quedo
sorprendentemente delicioso, rindió muy poco la fruta por su delicada textura,
un envase de cuatro onzas el que dividí para dos; para mi esposo y mi papá
quien es el catador oficial de nuevos dulces, pues él un fanático del dulce y de
los postres elaborados con frutas. El resultado arrollador, quedo el dulce de
Mamey catalogado como uno de categoría excelente tanto por mi papá, mi mamá y
mi esposo. Es mucho decir cuando se
atreven a afirmar que es mucho mejor que
el de guayaba o mangó.
Demás está decirles que ya realice la petición de más Mamey
para poder elaborar el dulce, esta vez en una cantidad honorable, para que
ellos repitan y poder enviar a mis hijos.
2 mameys cortados en lascas
2 tazas de azúcar granulada
3 palitos de canela
1 cta. clavos de especias
1 cda. vainilla
6 tazas de agua
Procedimiento
Pelar y cortar el mameyLlevar a una olla a fuego alto en la estufa
Añadir el azúcar
La vainilla y los clavos de especias
La canela y por último el agua
Hervir a fuego alto
Reducir, mover ocasionalmente
Notarás que el azúcar se carameliza, se verá de un color amarillo
El punto del dulce es, cuando al mover se retire completamente de la olla quedando el área limpia, tal como vez en la foto, retirar del fuego
Refrescar a temperatura ambiente, envasar en cristal con tapa, servir con queso y o galletas
Te cruento que la primera vez que probé el mamey fue en 2007 cuando viaje a Miami (visitar mis primas que son de Cuba) y simplemente ame la fruta, aquí en Brasil, raramente la encuentro, más el día que la encuentro, no pienso dos veces, me la compro, pues te digo que hoy en día es mi fruta predilecta
ResponderEliminardelicioso
ResponderEliminarMuy rico, pero quisiera otras recetas x ejemplo con leche
ResponderEliminarSacame una duda por favor, vivo en Peru y aqui el mamey tiene pulpa muy firme y crujiente es asi el que tu indicas para tu mermelada?.. gracias!
ResponderEliminarAquí en algunas regiones en Volombia confunden el mamey con una clase de zapote.
ResponderEliminarLo hice. Tan bueno como el que hacía mi tía Carmen! Y eso es mucho decir! Gracias!
ResponderEliminarPor fin conseguí la receta que
ResponderEliminarBuscaba tenía idea pero no me acordaba bien.lo empecé lo unico que le heche mucha agua
Pero le hecho esos mismos ingredientes me falto vainilla le voy a hechar ahora. Mi madre
Lo hacía así rico gracias.
Zoila de Utuado P.R.