Tal vez no es la receta más elaborada para compartir, es algo simple, como todo lo que hago.
Cosas sencillas para gente como tú o como yo. Pero que igualmente las disfrutamos, de eso
se trata la vida, de encontrar lo mejor en lo simple en lo sencillo. Quizás no es la mejor receta
para compartir después de tanta ausencia. Pero aquí estoy, de nuevo...
Hace meses tengo preparada esta receta, se que he estado ausente del blog, de las redes,
esto me ha costado, que el blog no se vea tanto como antes, que se me haga difícil compartir
historias, me he alejado de ustedes que de cierta manera me motivan siempre a continuar con mis publicaciones, ustedes a los que no veo pero con los que siento contacto y respaldo.
No es que me he cansado, no me he rendido, siempre pensé que después del retiro dedicaría
más tiempo a estas páginas, que de cierta manera me llenan en todos los aspectos y son una forma de compartir historias y un poco de conocimiento. Esa era mi meta al retirarme.
Pero las cosas al final no son como deseamos.
Se trata de que estos dos últimos años me han pegado duro; se que han sido años difíciles
para todos pero para algunos han sido mucho más fuerte aún, así han sido para mí
devastadores en todos los sentidos.
No vengo a compartir mis penas, por que de eso esta lleno el nuestro diario vivir en los
últimos tiempos, tiempos en los que muchos hemos perdido, no solo nuestras rutinas, también seres queridos. Cosas que jamás pensamos que pasarían . A nuestras puertas ha tocado la
enfermedad de tantas maneras, en formas diferentes, a diferentes seres queridos.
Son varios años de vivir una cosa tras otra, sin parar, sin tomar pausa...
En ocasiones nos mostramos fuertes, pero la realidad es que es una fortaleza fingida,
porque lo que la vida nos arrebata, no se recupera, ni siquiera la alegría, el tiempo y lo que
no hemos compartido.
Me retire y estaba feliz, pero nada resulto como esperaba, en ocasiones la vida es así y nada podemos hacer con eso.
Son nuevos tiempos, los que nos han hecho cambiar y madurar .
Lamentablemente estos tiempos no terminan, vendrán muchas más cosas por vivir y ver.
Solo nos falta, esperar y confiar en que todo tiempo futuro será mejor.
Así que dentro de esta tormenta, siempre esta la semilla de compartir lo poco o lo mucho
aprendido, de continuar, de vivir, de recobrar la esperanza y esperar lo mejor.
De alguna manera el blog se trata de compartir historias, la mía entre ellas, la de mi isla,
sus costumbres, nuestra historia y su gente. Esa es la diferencia en mis recetas, van
acompañadas, de vivencias, de recuerdos, de historia y tradición; mía, de mi mi familia,
de mi gente y de mi pueblo.
Que los nuevos tiempos tiempos sean mejores para ustedes....
Aquí esta deliciosa y sencilla receta de empanadas de plátano verde ideal como entremés,
para merienda o cualquier hora del día.
Espero que este sencillo paso a paso te ayude a elaborar las tuyas, recuerda que siempre
las puedes rellenar como prefieras.
Procedimiento
Relleno
Calentar el aceite, sofreír la cebollaAñadir el pimiento, sofreírAñadir el pollo sellar, añadir sazón, sazón completo, aceitunas
Sofreír, reservar
Masa
Pelar y picar los plátanos en tres partes, llevar al fuego con suficiente agua
Hervir hasta que estén blandos, escurrir, verter en un recipiente Majar con la ayuda de un majador de plátanos Añadir agua caliente de la que herviste los plátanos
Amasar como vez en la foto, hasta formar una pasta que se separe del moldeAmasar en pequeñas masas formando una bola
Colocar sobre una bolsa o papel plástico, aplanar formando una plantilla
RellenarCerrar con la ayuda del plástico , presionar hasta el cierre
Freír
5 comentarios:
Saludos, se ve rico, me puedes decir si el Plátano es verde
El titulo dice Empanadas Plátano Verde.
Se ven sabrosa la receta.
Se ven sabrosa Gracias por compartir la receta Bendiciones
El plátano al hervir lo lleva sal en el agua ó algún condimento al majar?
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